COLORADO SPRINGS, Colo. — El sospechoso del ataque del fin de semana pasado en un club LGBTQ+ de Colorado Springs que dejó cinco muertos y otros 18 heridos compareció ante el tribunal por primera vez la mañana del miércoles 23 de noviembre, respondiendo tres preguntas básicas mientras estaba esposado y con un traje protector naranja.
La audiencia de Anderson Lee Aldrich ante la jueza de la corte del condado El Paso, Charlotte Ankeny, duró cuatro minutos.
El sospechoso debe regresar a la corte el 6 de diciembre, aunque es posible que esa fecha cambie.
La audiencia del miércoles comenzó a las 11:29 a. m. El sospechoso apareció en un enlace de video de la cárcel del condado. A lo largo de la audiencia, la cabeza del sospechoso se desplomó hacia un lado.
Los abogados defensores presentaron anteriormente documentos que decían que el sospechoso no es binario y usa los pronombres "ellos" y "ellos".
Ankeny primero le preguntó al sospechoso su nombre.
"Anderson Aldrich", respondió el sospechoso.
"Sí", respondió Aldrich después de que Ankeny les preguntara si habían visto un video explicando sus derechos constitucionales.
"No", respondió el sospechoso cuando se le preguntó si tenía alguna pregunta.
Aldrich está detenido sin fianza bajo sospecha de los siguientes cargos en el tiroteo:
- Cinco cargos de asesinato en primer grado tras deliberación.
- Cinco cargos de un delito motivado por prejuicios que causa lesiones corporales.
Aldrich ingresó en la cárcel del condado El Paso después de ser dado de alta del hospital el martes.
Cinco personas, Daniel Aston, Kelly Loving, Ashley Paugh, Derrick Rump y Raymond Green Vance, murieron en el tiroteo. Otros diecisiete resultaron heridos por disparos. Otra persona resultó herida, pero no por herida de bala.
Las autoridades inicialmente dijeron que al menos 25 personas resultaron heridas en el tiroteo, pero aclararon el lunes 21 de noviembre que al menos 18 personas sufrieron heridas además de las cinco víctimas que murieron.
Dos personas, Thomas James y Richard Fierro, detuvieron al pistolero y evitaron que lastimara a más personas, dijo la policía.
Los investigadores aún están trabajando para determinar el motivo detrás del tiroteo.
Aún no se han presentado cargos formales. Cuando se le preguntó acerca de posibles cargos por delitos motivados por prejuicios, el fiscal del Cuarto Distrito Judicial Michael Allen dijo: "Es importante que, si tenemos pruebas suficientes para respaldar los delitos motivados por prejuicios, los acusemos. Es importante para esta comunidad. Es importante para el esfuerzo de la acusación mostrar por qué sucedió algo, y si hay suficiente evidencia para respaldar eso en este caso, cuando lleguemos a la presentación formal de los cargos, incluiremos esos cargos aquí también”.
Esta es la fotografía de fichaje del sospechoso del tiroteo en el Club Q.
El fiscal de distrito Michael Allen analiza el caso del tiroteo en el Club Q
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