DENVER — Mientras camina hacia y desde el trabajo todos los días, Daniella Maldonado se cruza con un grupo de migrantes que buscan trabajo. Hace unas semanas, bajó la ventanilla y conoció a una familia de Venezuela.
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“Vinieron aquí para tener una vida mejor que la que tenían en Venezuela”, dijo Maldonado. "Están pidiendo trabajo. No están pidiendo limosnas. Si la gente no da un paso al frente para ayudarlos, no estoy segura dónde van a terminar".
Maldonado es una entrenadora física y propietaria de Boom Lab Fitness en Denver. Su empresa no tenía ofertas de trabajo, pero aún así puso una a disposición.
"Les ofrecí un trabajo", dijo Maldonado. "Aparecieron a la mañana siguiente".
La pareja, Renny y Humeisy, que eran novios desde la adolescencia, estaban dispuestos a trabajar. Ambos querían ganarse el dinero y limpiaron el gimnasio mientras sus hijos, de 3 y 5 años, observaban.
"Ella hizo un trabajo increíble y fue entonces cuando comenzamos a hablar de su historia", dijo Maldonado.
Maldonado se enteró rápidamente de lo que pasó la familia de cuatro miembros en su caminata de tres meses para buscar refugio en Estados Unidos.
“No puedo imaginarme pasar por todo lo que ellos han pasado con sus bebés a su lado”, dijo Maldonado. “La mitad de nosotros nos quejamos de llevar a nuestros hijos al supermercado con nosotros y de lo difícil que es, y cruzaron nueve países con sus hijos”.
"El último día en la selva, estuvimos allí cinco días y nos quedamos sin comida", dijo Humeisy.
Cuando la familia quiso darse por vencida, Humeisy dijo que fue su hijo de 5 años quien los mantuvo adelante, alentando a sus padres a encontrar la fuerza para seguir caminando.
“Ya no podía seguir adelante y él me dio fuerzas”, dijo Humeisy. “Él decía: 'Mami dale, que tu puedes'".
Humeisy dijo que estaban a 11 días de ser expulsados del hotel-refugio cuando la comunidad de gimnasios de Boom Lab Fitness intervino para ayudar.
“Sabían que si querían algo mejor para ellos y sus hijos, principalmente, iban a tener que dejar todo lo que habían conocido y hacer un gran viaje para llegar hasta aquí”, dijo Maldonado. “Me conmovió y luego también conmovió a muchos otros clientes”.
Tanto es así, dijo Maldonado, que todos empezaron a colaborar. Primero, encontraron un apartamento donde la familia podía quedarse sin pagar alquiler hasta que estuviera financieramente estable. Luego, encontraron muebles para hacer el hogar y ropa para que los niños se sintieran cómodos.
“No sabía que iba a encontrar una persona tan buena como ella en el camino”, dijo Humeisy con lágrimas en los ojos. “Pensábamos que se iban a acabar los días en el hotel, pensando adónde íbamos a ir con nuestros bebés”.
“Básicamente, a estas personas se les dice: 'Si aún no has decidido qué hacer, qué lástima, lo siento, pero te hemos dado todo lo que podemos, ahora sólo tienes que irte'”, dijo Maldonado.
La comunidad de gimnasios ahora está tomando medidas para ayudar a la familia a abrir una cuenta bancaria y obtener la ciudadanía estadounidense.
"Me encantaría verlos vivir el sueño que vinieron a vivir aquí", dijo Maldonado. "Me encantaría ver a sus hijos ingresar a la escuela y algún día ir a la universidad aquí en Estados Unidos. Me encantaría verlos aprender inglés, conseguir buenos trabajos y poder vivir cómodamente. Eso es justo lo que me encantaría ver. Eso es lo que sigue reproduciéndose una y otra vez en mi mente".
Maldonado dijo que también crearon unGoFundMepara ayudar a la familia con las necesidades básicas.
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