GREELEY, Colo. — Colorado sabe cómo dar la bienvenida a los recién llegados a Estados Unidos. Durante décadas, este estado ha sido un faro para los refugiados.
Ahora esa experiencia está dando sus frutos, ya que un pequeño número de inmigrantes que llegaron a Denver desde la frontera sur van a una ciudad más pequeña.
En Greeley, el Centro de Inmigrantes y Refugiados del Norte de Colorado (IRCNOCO por sus siglas en inglés) quiere asegurarse de que todos se sientan bienvenidos.
"Prácticamente de todo el mundo tenemos clientes en el pequeño Greeley, Colorado", dijo Tony Archer, de IRCNOCO. "Es nuestro hogar y también debería ser el hogar de nuestros clientes".
El centro brinda servicios a las personas que son nuevas en los EE. UU. para descubrir su nuevo hogar, desde lecciones de inglés hasta clases de ciudadanía y servicios laborales. No solo están viendo un aumento de inmigrantes de América del Sur, están viendo un aumento de inmigrantes y refugiados de todas partes.
"Es un lugar seguro para que vengan las familias", dijo Araceli Calderón, directora de IRCNOCO. "Se preguntan, ¿cuáles son los servicios disponibles? Para nosotros, es muy importante conectarnos con ellos para que se sientan seguros".
Si bien el condado Weld no ha visto la misma cantidad de inmigrantes que Denver en los últimos meses, muchos de los que vienen a través de Colorado han optado por quedarse en Greeley. El número de personas inscritas en clases en el centro casi se ha duplicado a 800 en los últimos meses. Son personas de todo el mundo.
"Recientemente tuvimos que contratar a varios empleados nuevos que hablan diferentes idiomas solo para manejar la carga de clientes de los diferentes clientes que ingresan", dijo Archer. "Obviamente, el área de Denver ha visto un aumento mayor que el nuestro, pero definitivamente ha habido un aumento. Ha afectado nuestra necesidad de más programación y más clases, por lo que hemos tenido que contratar a más maestros".
Las personas terminan en lugares como Greeley por varias razones, pero en su mayoría es orgánico y de boca en boca. Dicen que se ha formado una fuerte comunidad de inmigrantes donde las personas que conocen a otros que vienen a Colorado les dirán que se establezcan juntos. También hay mucho trabajo para las personas que no hablan inglés.
Cuando llegan a Greeley, se unen a personas como Shukur Manaf, que llegó a Estados Unidos desde Myanmar.
"Hablo siete idiomas", dijo Manaf. "De hecho, tomé clases de inglés aquí durante unos tres a seis meses antes de comenzar a trabajar".
Manaf ahora trabaja en el centro, ayudando a las personas que han llegado recientemente.
"Cuando se muda a un país diferente, no sabes el idioma, no conoces la cultura. Hay tantos aspectos diferentes", dijo Manaf.
Para aquellos que eligen quedarse en Colorado, hay ayuda para que se sientan como en casa.
"Quiero asegurarme de que todos sepan que pueden tener recursos y amigos en esta comunidad", dijo Calderón.
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