DENVER — La ciudad de Denver desalojó un campamento de migrantes en Central Park el miércoles por la mañana, citando preocupaciones de seguridad y el hecho de que el campamento estaba en propiedad privada.
Cuando se desalojó el campamento de Central Park, muchas de las personas que vivían allí se mudaron a otro campamento en Green Valley Ranch. Esta segunda ubicación también fue barrida por la ciudad.
El martes, la ciudad le había ofrecido refugio a todas las personas que estaban en el campamento de Central Park. Todas esas ofertas fueron rechazadas. El miércoles, Denver cambió las condiciones para adultos solteros, aumentando el tiempo de estancia de tres a siete días.
Todos en el segundo campamento decidieron aceptar la oferta de la ciudad el miércoles, y ahora están en un refugio de Denver.
Aproximadamente 100 inmigrantes habían estado viviendo en el campamento de Central Park, que estaba en propiedad de Union Pacific, una empresa de ferrocarril. Tanto individuos como familias con niños se quedaron en ese campamento durante siete semanas.
Un portavoz de la ciudad dijo que habían estado tratando de trasladar a los niños para que no estuvieran viviendo en las calles, pero sus intentos no habían sido exitosos. A las personas sin unidades familiares se les ha señalado otros recursos de refugio.
Inicialmente, el campamento fue establecido por la organización All Souls, dirigido por Candice Marley.
Marley dijo que muchas de las familias fueron desalojadas de sus apartamentos debido a que fueron puestos en contratos de arrendamiento a través de programas administrados por la ciudad. Al final, esas familias no pudieron mantenerse al día con los pagos del alquiler, y Marley dijo que luego fueron al campamento.
Durante la última semana, más o menos, la organización sin fines de lucro Housekeys Action Network también ha trabajado con la ciudad en nombre de las personas que viven ahí. El lunes, hicieron una lista de 13 exigencias para que las personas en el campamento consideren entrar a refugios:
Los migrantes cocinarán su propia comida con ingredientes frescos y culturalmente apropiados proporcionados por la ciudad en lugar de recibir comidas preparadas anteriormente — arroz, pollo, harina, aceite, mantequilla, tomates, cebollas, etc. Además, la gente no será castigada por traer y consumir comidas de afuera.
El acceso a las duchas estará disponible sin límites de tiempo y se podrá acceder en cualquier momento.
Visitas médicas profesionales re realizarán con regularidad, y se realizarán recomendaciones/conexiones para recibir atención especializada cuando sea necesario.
Todos recibirán el mismo apoyo de vivienda que se ha ofrecido a los demás. No se puede expulsar a la gente en 30 días sin haber establecido algo estable.
Debe haber un proceso claro y justo antes de expulsar a alguien por cualquier razón, incluyendo advertencias verbales, escritas y finales.
Todos los residentes del refugio serán conectados con apoyo de empleo, incluyendo aplicaciones de trabajo para las personas elegibles.
Se deben organizar consultas gratuitas para cada persona/familia con un abogado de inmigración para discutir/avanzar en sus casos, y la ciudad proporcionará apoyo legal continuo en forma de clínicas [enfocadas en] documentos de inmigración y transporte para ir a citas de la corte relevantes.
La ciudad les dará privacidad a las familias/individuos en el refugio.
No se permitirá más abuso verbal o físico por parte del personal, incluido que ningún sheriff duerma adentro y esté monitoreando 24/7.
Se ofrecerá transporte para todos los niños para ir hacia y desde sus escuelas hasta que terminen [sus clases] en tres semanas.
No se pueden separar familias, independientemente de si los miembros de la familia tienen hijos. El campamento permanecerá unido.
La ciudad debe programar una reunión con el alcalde y las personas que están directamente involucradas en dirigir el programa de recién llegados lo antes posible para discutir mejoras y formas de apoyar a los migrantes.
La ciudad debe proporcionar a todos los residentes un documento firmado por un funcionario de la ciudad en inglés y español con todas estas demandas que incluya un número al que llamar para denunciar cualquier maltrato o si no cumplen sus promesas.
Los migrantes en el campamento dijeron que no confían en que la solución ofrecida, 30 días en un refugio, se convierta en realidad.
Mandy Pimentel, madre de cuatro hijos, había estado viviendo en el campamento durante aproximadamente un mes. No había aceptado el refugio porque dijo que no estaba segura si realmente recibiría 30 días allí.
Pimentel dijo que, anteriormente, le dijeron que se iba a poder hospedar en un refugio por un mes cuando llegara, pero solo le dieron tres días. Describió su experiencia en el sistema de refugio como, “no tan buena”.
“No me da garantía que ellos me digan, de boca, ‘Vamos a un refugio’, si no me dan un papel donde, que yo diga, certifique que yo voy a estar 30 días, un mes, dos meses en ese refugio”, dijo Pimentel.
Si bien dijo que su experiencia no ha sido fácil, es “lo que tocó” para proteger los sueños de sus hijos de estudiar mientras se acomodan en Estados Unidos.
Pimentel dijo que no tenía un plan para lo que sucedería después de que los oficiales aparecieran el miércoles.
“Si mañana nos van a sacar a la fuerza, no sé dónde estar, si estar en un cuarto o también volver a otro sitio a acampar”, dijo Pimentel.
El departamento de Servicios Humanos de Denver (DHS) dijo que le quiere ofrecer refugio a todas las familias y que ha intentado mantenerse en contacto con el campamento. Debido a un caso de varicela, DHS proporcionó una clínica de vacunación durante tres días para todos los que vivían en el campamento.
Joe Ewing, un portavoz de DHS, dijo que los defensores de la comunidad están impidiendo que ellos trasladen a la gente a un lugar bajo techo. Eso ha dejado a la agencia con pocas soluciones que ofrecer a las que la gente ya ha sido receptiva.
Ewing dijo que la agencia cree que esta es la mejor opción para las familias, pero no ha podido convencerlas de que abandonen sus carpas.
Union Pacific, la empresa de ferrocarril dueña de la propiedad, provocó que se publicara el desalojo del campamento.
En un comunicado, la empresa dijo que ellos están “trabajando para abordar las actividades de campamento ilegales y peligrosas en nuestra propiedad, especialmente a unos pocos pies de las vías del tren. La falta de vivienda sigue siendo un desafío social continuo y estamos comprometidos a trabajar con agencias locales, estatales y federales para abordar el problema lo más rápido posible y de conformidad con la ley”.
El martes, Shontel Lewis, concejala del Distrito 8 de la ciudad de Denver, estuvo en el campamento con su equipo recolectando comentarios de la gente sobre sus deseos para los próximos pasos a seguir. El grupo en el campamento había pedido que, si se mudaban, se mudaran juntos a un refugio o una nueva ubicación.
“En última instancia, no es diferente de muchas de las cosas que escuchamos de las comunidades, hay un pedido de quedarse juntos, lo cual creo que es un pedido perfectamente normal que escuchamos de personas que terminan reuniéndose de esta forma”, dijo Lewis.
Ella dijo que planea llevar esta información a la oficina del alcalde y a su equipo para determinar qué podrían hacer para evitar que la gente fuera desalojada el miércoles.
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