IDAHO SPRINGS, Colo. — La Oficina del Alguacil del Condado Clear Creek ha iniciado una investigación sobre la muerte de un hombre en Idaho Springs después de que un grupo de búsqueda organizado por la comunidad encontró su cuerpo a los pocos minutos después de iniciar su búsqueda. La desaparición del hombre había sido reportada tres días antes.
El médico forense del condado Clear Creek identificó al difunto como Paul Peavey, de 57 años, quien había sido reportado como desaparecido el miércoles. Bruce Boynton, uno de los amigos más cercanos de Peavey y el dueño del restaurante Pickaxe Pizza en Idaho Springs, organizó el grupo de búsqueda que finalmente encontró el cuerpo de Peavey. Boynton expresó su frustración con las autoridades, diciendo que esto no debió haber sido la responsabilidad de la comunidad.
Boynton dijo que Peavey era un cliente habitual en su restaurante y que normalmente pasaba por allí al menos dos días por semana. Había visto a Peavey recientemente, pero sabía que su amigo era un hombre ocupado. La situación se volvió alarmante cuando otro amigo de Peavey llamó a preguntar si Boynton lo había visto.
El miércoles, Boynton dijo que él y al menos cuatro otras personas denunciaron la desaparición de Peavey a las autoridades. Cada vez más preocupado, Boynton decidió revisar la propiedad de Peavey por su cuenta e incluso forzó la puerta exterior para tener acceso. Lo que encontró solo le aumentó sus miedos.
"Sus cachorros no están, su equipo no está, cualquier objeto de valor está desaparecido, las puertas están completamente abiertas y nadie [estaba allí]", dijo Boynton. "Sentí que mi amigo estaba en peligro, o peor. Y teníamos razón".
Peaver, un criador de perros dóberman de servicio, tenía 13 cachorros que estaban desaparecidos cuando Boynton visitó la propiedad. Según Matthew Harris, el alguacil del condado Clear Creek, un agente fue enviado a registrar la propiedad el jueves, pero no encontró cadáveres.
Tres días después de presentar la denuncia de la desaparición, Boynton decidió tomar cartas en el asunto. Organizó un grupo de búsqueda comunitario, el cual comenzó su búsqueda el sábado por la mañana. En cuestión de minutos, el grupo descubrió el cuerpo de Peavey. Boynton dijo que el cuerpo estaba en un estado horrible, cubierto al azar con palos, piedras y escombros.
"Nada que nadie quisiera ver en su vida. Es algo que podría perseguirte por el resto de tu vida", dijo Boynton.
Harris luego explicó que el cuerpo estaba ubicado más lejos de la propiedad, en un terraplén, y que no estaba a la vista, pero que el estado del cuerpo sugirió que fue una muerte sospechosa.
Si bien el médico forense del condado Clear Creek identificó a Peavey de manera oficial, Boynton dijo que ellos lo identificaron inmediatamente por sus características distintivas y sus tatuajes. Aunque Boynton expresó su gratitud de que las autoridades ahora estén investigando, criticó la forma en que se abordó el caso inicialmente.
"No deberíamos haber sido nosotros. Las autoridades deberían habernos escuchado desde el principio y actuar en consecuencia, pero no lo hicieron... Están de nuestro lado ahora, pero tuvimos que comprobar lo que les habíamos estado diciendo durante días", dijo Boynton.
Harris reconoció que el informe de la desaparición no indicaba que Peavey podría estar en peligro y señaló los límites de los recursos del departamento.
"Tenemos un personal pequeño... Nos llegan muchas quejas, y tenemos que clasificarlas en orden de importancia... Si la situación y la información que recibimos sugirieran que una persona estaba en peligro, ciertamente tendríamos un equipo más grande aquí".
Más de 40 personas se unieron a la búsqueda el sábado por la mañana, y muchas de ellas ni siquiera conocían a Peavey personalmente.
"Vamos a extrañar a Paul. Y ojalá esto abra los ojos de la gente sobre lo que significa la comunidad", dijo Boynton.
La oficina del alguacil ha clasificado la muerte de Peavey como un homicidio y su investigación sigue en curso. Dijeron que no creen que la comunidad esté en peligro inminente.